Antioxidantes como alimentos funcionales

Abstract

"Se consideran alimentos funcionales aquellos que han demostrado científicamente que afectan beneficiosamente a una o varias funciones del organismo, de manera que proporcionan un mejor estado de salud y bienestar. El estrés oxidativo, es el daño progresivo e irreversible de las biomembranas, tiene su origen en el incremento de los radicales libres en el ambiente pericelular e intracelular, especialmente de especies reactivas del oxígeno. Una sobre carga de radicales libres produce una destrucción del tejido, y esto pueden generar enfermedades crónicas no transmisibles ya que ocasionan daño en cadena a las células evitando que estas se puedan regenerar, reduciendo así las funciones del sistema inmunológico. Los radicales libres se generan constantemente en nuestro cuerpo y en nuestro medio ambiente. En la actualidad existe suficiente evidencia de que la ingesta de antioxidantes reduce el riesgo padecer estas enfermedades, ya que son sustancias que reaccionan químicamente con los radicales libres haciéndolos inocuos y al mismo tiempo impidiendo su creación. Las formas biológicamente activas de las vitaminas C y E, así como el glutatión reducido, constituyen antioxidantes de alta capacidad reductora y actúan neutralizando radicales libres, claro que no solo esas vitaminas actúan como antioxidantes pues hay un gran listado de las que no pueden ayudar a combatir los radicales libres. Por otro lado la dotación enzimática antioxidante de las células eucariontes comprende una serie de hemoenzimas (peroxidasas, catalasa y superóxido dismutasa) cuya actividad catalítica neutraliza el efecto de radicales libres, producidos en el metabolismo celular. La prevención para estas enfermedades puede lograrse con el consumo de los alimentos funcionales dentro de una dieta"