Respuestas de la flor de nochebuena (Euphorbia pulcherrima Willd. ex Klotzsch) al balance iónico en la solución nutritiva: planta madre y flor en maceta.

Abstract

La nochebuena es una especie nativa de México y es la más utilizada como planta ornamental durante las fiestas decembrinas en todo el mundo (Colinas-León et al., 2006). La flor nochebuena es la parte más atractiva para el consumidor por lo que la calidad de esta es la más importante, esto se logra cuando las plantas son cultivadas en condiciones adecuadas. Lo que sugiere realizar estudios enfocados a factores en influyen en su producción. Una buena calidad de los esquejes y una adecuada nutrición mineral son factores determinantes para la producción de estas plantas, pues Torres y López (2009), indican que el éxito de la producción de estas plantas se comienza con esquejes de alta calidad y la nutrición impacta en el crecimiento y en la calidad al repercutir en el tamaño de las flores, así como en el área foliar, la obtención de colores más firmes y en el desarrollo del sistema radical (Pineda-Pineda et al., 2008). La calidad y la madurez de los esquejes está bien documentada que es determinada por las condiciones de crecimiento de las plantas madre, sin embargo, hay poca o nula información sobre el manejo nutricional de estas plantas madre. La nutrición de las plantas en maceta debe realizarse tomando en cuenta factores como: la calidad de agua, propiedades del sustrato de cultivo, estado fenológico de la planta, clima, tipo de fertilizante, técnica de cultivo y objetivos de la nutrición. La nutrición mineral debe ser específica de acuerdo con la demanda según la etapa fenológica, destacando entre estas etapas las siguientes: 1) crecimiento radicular; 2) crecimiento vegetativo; y 3) floración (Vázquez y Salomé, 2004). Por eso se crea la necesidad de buscar nuevas alternativas para el aumento de la producción y la calidad.