Efectividad Biológica de Tres Especies de Bacillus spp. y Tres Especies de Trichoderma spp, Contra Fusarium oxysporum y Fusarium solani

Abstract

RESUMEN: La producción de melón con el paso de los años, se ha visto afectada, ocasionando pérdidas y bajos rendimientos en la cosecha. Dentro de ellos se encuentra la marchitez del melón, daño asociado principalmente a especies de Fusarium oxysporum y Fusarium solani. El uso excesivo de fungicidas para el control químico de esta enfermedad ha provocado problemas de resistencia y eficiencia en el control de la enfermedad aunado a la contaminación del medio ambiente. La utilización de microorganismos antagónicos para el manejo de la marchitez del melón es hoy en día una alternativa para reducir la incidencia y la severidad de la enfermedad y así paulatinamente la resistencia. Esta investigación se planteó cómo estrategia la evaluación de microorganismo antagónicos del tipo Trichoderma spp y Bacillus spp como biocontrol de la pudrición radical del melón. Para ello se realizó el aislamiento de Fusarium partir de la raíz y tallo de plantas de melón que presentaron síntomas de la enfermedad. La identificación se realizó mediante claves taxonómicas y los bioensayos de actividad se realizaron en placas Petri con PDA; para Bacillus, el patógeno se colocó en el centro y el antagonista se distribuyó en cuatro puntos cardinales, en el caso de Trichoderma spp se colocó en un extremo al antagonista y enfrente al patógeno. Los resultados muestran que para el caso de Bacillus, a B. amyloliquefaciens con un porcentaje de inhibición de 44.54% mientras que Trichoderma viride (Tv) T. asperellum (Ta) y T.harzianum (Th2), se ubicaron en las categorías I y II de Bell, T. viride, creció más de la tercera parte de la superficie de la placa, lo que lo sitúa en la clase 2 de la escala, excepción las cepas de Th2 y Ta que se desarrollaron en toda la placa, lo que hizo que se ubicaran en la clase 1. Los resultados obtenidos son aceptables para el manejo de la enfermedad, teniendo como alternativa el empleo de agentes microbianos para el control de la pudrición radical del cultivo de melón.