Cuerpo lúteo y luteólisis

Abstract

"La interacción de los gametos producidos por ambos sexos constituye la base del proceso reproductor y, por lo tanto de la perpetuidad de las especies. En el macho la gametogénesis se produce de forma continua, en la hembra, la formación y liberación de las células germinales es un proceso cíclico debido a las interacciones endocrinas que se producen entre el hipotálamo, la hipófisis y los ovarios (Sacristán, 1995). La mayor función de las gónadas femeninas es la diferenciación y liberación de un oocito maduro para la fertilización y la subsecuente propagación de la especie. Adicionalmente, el ovario produce esteroides que ayudan a la diferenciación de los caracteres sexuales secundarios y a mantener la preñez (McGee y Hshue, 2000). El ciclo estral de los animales domésticos, se define como, el período de tiempo que va desde el inicio del celo o estro hasta el inicio del siguiente. Entendiendo como estro, el periodo en el cual la hembra acepta al macho y por lo tanto permite la monta y la cópula. Por el contrario, en la mujer en la que no existe estro; el ciclo menstrual, (intervalo de tiempo entre una menstruación y la otra) representa el periodo reproductivo en la especie humana (Hafez, 2000; Ramírez, 2006). El ciclo ovárico en un animal no preñado se define como el intervalo que existe entre ovulaciones sucesivas. La ovulación en los animales domésticos se produce durante el celo o horas posteriores de terminadas las manifestaciones externas del mismo (Ramírez, 2006). 2 Los ciclos ováricos de los mamíferos pueden dividirse en ovuladores espontáneos (ciclos repetidos con ovulación durante un tiempo específico sin necesidad de cópula - vaca, cabra, oveja, caballo y cerdo-), ovuladores inducidos (la cópula es necesaria para que la ovulación se presente-conejo, gato, visón, hurón y el camello-) (Mccracken et al. 1999). El ciclo estral, tiene una duración promedio de 16-25 días dependiendo de la especie. Este se compone por cuatro etapas (proestro, estro, metaestro y diestro), y varían en duración dependiendo de la especie. Así también, puede dividirse en fase folicular o estrogénica y lúteal ó progestagena, debido la estructura predominante en el ovario (Cunningham, 1999). La ovogénesis y foliculogénesis son los procesos en conjunto de formación y desarrollo del ovocito y del folículo respectivamente. El folículo constituye la unidad estructural y funcional de los ovarios. Se clasifican en primordiales, primarios, secundarios y terciarios de acuerdo a las características histológicas de las células de la granulosa que rodean al ovocito y al grado de maduración del mismo (Gigli et al. 2006). El cuerpo lúteo es un órgano endocrino transitorio que sintetiza progesterona, el cual comienza a desarrollarse durante el metaestro y llega a su madurez en la fase de diestro, para luego experimentar luteólisis por medio de una combinación de factores, entre ellos una disminución en la secreción de progesterona que a su vez causa una secreción de PGF2 (Levy et al. 2000; Rueda et al. 2000). 3 La fase lúteal está caracterizada por ausencia de manifestaciones típicas de comportamiento sexual, presencia de cuerpo lúteo activo y altos tenores de progesterona plasmática circulantes (Echeverría, 2006). El fenómeno de luteólisis o regresión del cuerpo lúteo, determina el ciclo reproductivo de muchos mamíferos. Existen dos tipos de luteólisis, funcional y estructural. La primera incluye una disminución en la secreción de progesterona, mientras la segunda una disminución en el tamaño y peso de la glándula (Stocco et al. 2007). Es importante el análisis del cuerpo lúteo ya que juega un papel importante en la regulación del ciclo estral. La luteólisis es necesaria para permitir ovulaciones posteriores. Si no existe la presencia de esta estructura y su lisis, no habrá ovulaciones y por lo tanto disminuirá la eficiencia reproductiva de los animales (Patterson, 1989)"